Con la aparición de los smartphones, las tablets y las televisiones inteligentes nos pasamos todo el día delante de pantallas, una nueva costumbre a la que nuestros ojos no están adaptados. Los brillos y el prol con distancias cortas de enfoque nos acaban pasando factura
Cuidar nuestra vista requiere adquirir ciertos hábitos muy sencillos, que no suponen un gran sacrificio pero que si los practicamos desde niños, nos ayudarán a evitar problemas y enfermedades oculares serias cuando seamos adultos. Tener una vista sana no es sólo tener una buena visión o poder ver sin gafas, hay otros problemas y enfermedades asociados a la visión que debemos tener en cuenta.
1. No esconder nuestros problemas visuales.
Es muy común ocultar los problemas de vista, no nos producen dolor o una molestia considerable, queremos pensar que tenemos una vista de lince y nos da vergüenza que nos vean con gafas.
El primer paso para cuidar nuestros ojos es reconocer que sí tenemos un problema por pequeño que sea. Una minúscula deficiencia visual sin tratar puede ir aumentando hasta convertirse en un problema severo.
Debes acudir al oftalmólogo tan pronto como detectes alguna anomalía en tu vista.
2. Examinar la vista regularmente.
Tanto si tienes problemas oculares como si no, te recomendamos visitar al oftalmólogo regularmente. En la mayoría de casos, podremos detectar problemas que tú hayas pasado por alto.
Una revisión anual puede ayudarnos a detectar a tiempo enfermedades y trastornos que de otro modo se agravarían. Si quieres pedir cita con nuestros profesionales, llámanos al 93 368 83 36.
3. Beber la suficiente cantidad de agua.
Aunque pensemos que no tiene ninguna relación, una buena hidratación general se traduce en una correcta hidratación de nuestros ojos. Beber la correcta cantidad de agua puede evitar problemas como la sequedad ocular.
Las autoridades sanitarias recomiendan beber, por lo menos, dos litros diarios repartidos a lo largo del día.
4. Consumir alimentos buenos para tu vista.
Existen multitud de alimentos que contribuyen a conservar la salud de nuestros ojos. Las espinacas, la col y otros vegetales de hoja verde nos ayudarán a detener la degeneración macular. Los albaricoques y la zanahoria son ricos en carotenoides, activos que potencian una buena visión. Los arándanos reducen la fatiga ocular y el té ayuda a detener las cataratas.
5. Tener siempre un colirio en nuestro botiquín.
Estamos expuestos a líquidos, sustancias y productos químicos que pueden irritar nuestros ojos. Si tenemos un colirio o solución salina en nuestro botiquín, podremos solucionar la mayoría de estas irritaciones.
6. Usar gafas de seguridad siempre que sea necesario.
Si en casa o en el trabajo practicas una actividad que pone en riesgo la salud de tus ojos por salpicadura o proyección es conveniente usar unas gafas de seguridad. En muchas ocasiones subestimamos el peligro que suponen algunas actividades y acabamos sufriendo las consecuencias.
7. Dejar de fumar.
No es una tontería. Recientes estudios médicos apuntan que las personas fumadoras tienen un mayor riesgo de sufrir cataratas, daños en el nervio óptico e incluso acelerar la degeneración macular.
8. Tener breaks para descansar la vista.
Estamos todo el día pegados a una pantalla, en el trabajo, en casa o incluso en el metro. Aunque actualmente ésto resulta inevitable, sí que podemos evitar sus efectos negativos modificando un poco nuestros hábitos.
Existe la llamada regla 20-20-20, muy sencilla de aplicar. Consiste en cada 20 minutos, dejar de mirar la pantalla durante 20 segundos y mirar a unos 20 pies de distancia (6 metros).
También es importante no olvidarnos de parpadear. Os decimos esto porque, aunque pueda parecer extraño, mientras estamos frente a una pantalla nuestro ritmo de parpadeo disminuye.
9. Descansar.
Debemos dormir las horas suficientes para que nuestros ojos se puedan recuperar. Trasnochar demasiado también fatiga mucho a nuestros ojos, perdemos capacidad de enfoque y se resecan demasiado.
Aunque pensemos que es sólo un truco de belleza de chicas, una buena solución es usar rodajas de pepino. Colocar una rodaja encima de cada ojo con los párpados cerrados nos ayudará a descansar nuestra vista gracias a su frescor. Además el pepino tiene ácido ascórbico y cafeico, que evita la retención de líquidos y la inflamación.